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Hausmann: Sanciones son más efectivas que no comprarle petróleo a Venezuela

Ricardo Haussman, ministro de Planificación entre 1992 y 1993 durante la segunda Presidencia de Carlos Andrés Pérez, opinó que las sanciones impuestas por el gobierno estadounidense régimen venezolano son más efectivas que dejar de comprarle petróleo a Venezuela.

En una entrevista concedida al diario argentino Clarín, Haussman valoró que el no poder acceder a los fondos de los mercados financieros, lo que resaltó como un argumento que hasta ahora no tenía la comunidad internacional, afecta más al gobierno de  Nicolás Maduro a que Estados Unidos deje de importar crudo venezolano.

«Ya no será posible una colocación como la que hizo Goldman Sachs, que colocó deuda a una tasa del 50% anual», apuntó Hausmann.

«Gracias a las sanciones contra los jerarcas del gobierno le encontraron cuentas con 500 millones de dólares al vicepresidente Tareck El Aissami (…) Yo espero que vengan más sanciones», añadió el jefe del Banco Interamericano de Desarrollo.

Esto representa un problema para el gobierno que, según los cálculos de Hausmann, necesita $100.000 millones de dólares para «poner en marcha» al país.

«Creemos que vamos a necesitar unos 100.000 millones de dólares, la mitad por un shock de liquidez y la otra mitad postergando y reestructurando los pagos de la deuda», declaró el ex presidente del Comité de Desarrollo del FMI-Banco Mundial.

Estos cálculos nacen a partir de que, cree Hausmann, «la deuda más o menos documentada ronda los 118.000 millones de dólares. Y hay otros 60.000 millones que se acumulan por obligaciones impagas y retrasos diversos. En total, estamos cerca de los 178.000 millones de dólares».

«Lamentablemente, Venezuela ha sido arrasada y, cuando llegue el momento de iniciar la reconstrucción, será un país terriblemente pobre», añadió el economista.

Opinó que la recuperación de Venezuela pasa por recuperar el nivel de importaciones perdido. «Las importaciones de bienes y servicios per cápita cayeron en 75% en términos reales entre 2012 y 2016; y ese declive ha sido aún mayor en 2017», aseguró Hausmann.

«Para poder importar hay que reestructurar la deuda soberana, no hay otra salida. Y además, por supuesto, vamos a necesitar de todo el apoyo internacional concreto».

Fuente: El Nacional / Con información de Clarín.