El último incremento del salario mínimo fue anunciado por Nicolás Maduro el 14 de enero, pasando de 4.500 bolívares a 18.000 bolívares. Este último anuncio posiciona el pago de los trabajadores en el país en seis dólares a cambio de la tasa del dólar paralelo, siendo el más bajo registrado en el continente.
Durante la implementación del plan de recuperación económica en agosto de 2018, el dólar paralelo valía 65,18 bolívares, mientras que el pasado viernes se ubicó en 2.900 bolívares, teniendo un alsa de 14.336,88% en este período de tiempo. Además, el cambio del dólar oficial (Dicom), actualmente se encuentra en 1.001,74 bolívares, lo que representa 18 dólares, reseñó Crónica Uno.
Este pago representa el menor salario de Latinoamérica. Venezuela se encuentra por debajo de Cuba, cuyo salario vale 30 dólares y Haití, en donde se ganan 83 dólares. En el resto del continente, los pagos a los ciudadanos no baja de 100 dólares, como en Perú (279 dólares), Brasil (269 dólares), Bolivia (300 dólares) y Chile (427 dólares).
Con este salario, la ganancia de un ciudadano en el país representa menos de un dólar por día. El Banco Mundial indica que este margen de adquisición es denominado como pobreza extrema, señaló Efecto Cocuyo.
Estos incrementos no han ayudado a los venezolanos a contrarrestar la inflación debido su aumento acelerado. El Fondo Monetario Internacional proyectó que en 2019, la inflación cerrará con una cifra de 10.000.000%.
Fuente: El Nacional / Con información de Crónica Uno y Efecto Cocuyo.