´Si nosotros no dejamos una empresa rentable y estable, la generación que está estudiando no va a tener posibilidad de conseguir un empleo´, expresó el secretario de Trabajo y Reclamo de Sutralúmina, Eleazar Rojas.
YANETH FERNÁNDEZ | EL UNIVERSAL
lunes 30 de mayo de 2011 12:58 PM
Caracas.- La crisis registrada en la últimas semanas en las empresas básicas va más allá del reclamo de los trabajadoes que aguardan por mejores beneficios laborales. Se centra en una lucha para exigir más inversión y atención del Gobierno para mantener operativas las plantas, no solo para el provecho de las necesidades actuales sino también para las futuras generaciones.
´Si nosotros no dejamos una empresa rentable y estable, la generación que está estudiando no va a tener posibilidad de conseguir un empleo´, expresó el secretario de Trabajo y Reclamo de Sutralúmina, Eleazar Rojas, al destacar que la lucha sindical es por el destino de la empresa y la próxima generación.
Relató que el deterioro es no solo de las instalaciones de la planta o de los beneficios de los trabajadores, sino también en los valores y el profesionalismo. ´¿Cómo es posible que un presidente va a ir al lado marchando con alguien que es ajeno a nuestra ideosincracia en Bauxilum para arremeter en vez de proponer una mesa de discusión?´, dijo en declaraciones a El Universal.
La semana pasada ocho trabajadores resultaron heridos en medio de un enfrentamiento con otro grupo de la construcción (simpatizantes de Muralla Roja), quienes acompañaban al presidente de la empresa, José China, al momento que pretendían levantar el paro laboral.
Importancia de los sindicatos
El secretario de Trabajo y Reclamo de Sutralúmina llamó al Ejecutivo a sincerarse con respecto al rol de los sindicatos. Señaló que si lo que se pretende es acabar con este tipo de organizaciones se estaría burlando la voluntad de los trabajadores.
Además, se pierden años de lucha e irrespeto a los acuerdos internacionales. Resaltó que el Gobierno tiene que garantizar la libertad sindical, el desarrollo de las discusiones colectivas, pues de lo contrario, se estaría frente a un modelo de esclavitud moderna.
´Si anteriormente los esclavos tenían que estar sirviéndole al amo sin hablar, entonces nosotros estaríamos ejerciendo un trabajo sin derecho a reclamar las necesidades que tengamos´, detalló.
Recordó que el papel de la dirigencia sindical es servir de equilibrio entre el gobierno y los trabajadores, a modo de canalizar los reclamos y garantizar calidad de vida.