Caracas, 19 Ago. ABN.- Un grupo de empleados de la empresa estatal CVG Ferrominera Orinoco, entre 20 y 50 personas, intentó este miércoles paralizar de manera violenta las actividades diarias de la compañía, agrediendo con piedras y palos a los trabajadores que ejercían sus labores en las maquinarias y equipos de trabajo.
El secretario de organización del Sindicato de Trabajadores de Ferrominera (Sintraferrominera), Alfredo Spooner, denunció que entre la noche del martes y el mediodía del miércoles, un grupo dirigido por el sindicalista Rubén González irrumpió violentamente las instalaciones de la empresa y obligó a los trabajadores que allí se encontraban a detener su faena.
“En la noche del martes fueron agredidos los operadores de los equipos y maquinaria, mientras que el día miércoles se manifestaron contra los conductores de los trenes”, añadió.
Spooner explicó que el grupo minúsculo de trabajadores -en la empresa laboran 6.232 personas- cambió el rumbo de sus acciones, puesto que por no contar con el apoyo de la mayoría obrera, ahora han decidido atacar a sus mismos compañeros de trabajo y amenazarlos para ir a una huelga general.
“Ya su protesta no corresponde a la cancelación de un beneficio, ahora sus acciones se deben al desespero que sienten por no contar con el apoyo sindical y obrero”, manifestó.
Añadió que han intentado dialogar con este grupo pero se les ha hecho imposible, dada su “irracionalidad” para debatir, lo que finalmente los lleva a utilizar la fuerza y la violencia para detener las operaciones de la Ferrominera.
“Simplemente se les acabó su discurso y se quitaron la mascara. Aún así, yo les hago un llamado a la cordura, al diálogo y al entendimiento, para resolver la situación pacíficamente y sin agresiones”, subrayó.
De igual manera, Spooner sostuvo que llevarán una nueva denuncia ante el Ministerio Público, esperando que este grupo de personas se responsabilice por sus acciones y los daños materiales y psicológicos que origina.
Finalmente, indicó que los trabajadores de Ferrominera seguirán en pie de lucha, defendiendo el Plan Guayana Socialista y la transferencia de la empresas a manos de los mismos obreros, impulsando el desarrollo del mercado nacional por encima del extranjero.