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Cierre de la cuenta del Citibank pone en riesgo operaciones del Simadi

La decisión de Citigroup de cerrar las cuentas corresponsales que mantiene Citibank con el Banco Central de Venezuela y el Banco de Venezuela, en un período 30 días, pone en riesgo las operaciones de pago de importaciones que se realizan a través del Sistema Marginal de Divisas (Simadi) o el Sistema de Divisas Complementarias (Dicom), señaló una fuente cercana al Ministerio de Economía, Finanzas y Banca Pública.

Citigroup informó que después de una revisión periódica de gestión del riesgo en Venezuela, decidió suspender la banca corresponsal y el mantenimiento de ciertas cuentas en el país. «Esta decisión no es un reflejo de nuestro compromiso con un país al que hemos servido durante casi 100 años. Valoramos nuestro diálogo con la administración del presidente y esperamos para hacer frente a sus preocupaciones en el interés de continuar sirviendo a nuestros clientes», dice el grupo financiero en un comunicado.

Alejandro Grisanti, de la firma Knossos Fondo de Inversión, afirmó que la gravedad de la medida es que la mayor parte de las importaciones privadas se efectúan a través del Simadi (Dicom)  y no del Centro Nacional de Comercio Exterior como antes.

En riesgo. Para el cierre de junio las importaciones que se procesaron a través del mecanismo sumaron 20 millones de dólares, monto que supera al de los dos meses anteriores, cuyo promedio había sido 10 millones de dólares, según cifras extraoficiales. De cerrarse la cuenta,  no se podrían cancelar los pagos de las compras externas a los clientes.

El sistema cambiario obliga a que los pagos de las importaciones que llevan a cabo los sectores público y privado sean honrados por el BCV. Para poder efectuarlos, el instituto emisor utiliza lo que se llama una cuenta corresponsal, que en este caso es el Citibank. Para que la operación de entrega de divisas fluya, el BCV abre unas subcuentas a cada institución financiera en el país, y a través de ellas se hacen las transacciones de pago de importaciones del Simadi.  «El tema es bastante complicado porque toda la estructura operativa del Simadi o Dicom se hacía con cuentas corresponsales. Así, toda la estructura queda en el aire», aseguró el director de Ecoanalítica, Asdrúbal Oliveros.

Opciones. A partir de ahora hay dos opciones: que el BCV busque firmar un contrato de corresponsalía con otra institución financiera internacional, lo que se haría en más de 30 días, o que el gobierno decida cambiar el Convenio Cambiario N° 20 y permita que cada institución financiera venezolana utilice su propio corresponsal bancario internacional para hacer las operaciones con Simadi.

Esta posibilidad sería un inconveniente para bancos privados pequeños que no tienen corresponsales externos. «Hay un cambio regulatorio en la Reserva Federal de Estados Unidos que ha aumentado el riesgo para los bancos que son corresponsales bancarios en otros países. En el caso de Venezuela, los montos transados no deben estar compensando los riesgos del banco de mantener su corresponsalía», explico Grisanti.

Una fuente próxima al BCV confirmó que el instituto emisor conversa con Citibank para que se considere retrasar la medida. Simultáneamente, hay dos bancos estadounidenses que estarían interesados en firmar un contrato de corresponsalía. Sin embargo, hacerlo en breve significaría un alto costo para la nación, así como la tarifa por prestación de los servicios.

El gobierno, según la fuente, también está en conversaciones con instituciones financieras en Ecuador, Rusia y China a las que les ha ofrecido este contrato de cuentas corresponsales. «Con seguridad le vamos hacer llegar a los usuarios su dinero», dijo la fuente.

Fuente: El Nacional / BVA