700 funcionarios recorren las calles del país en búsqueda de aquellas panaderías que no cumplan con las órdenes dadas por el presidente Nicolás Maduro y que han sido acatadas por el superintendente de Precios Justos (Sundde), William Contreras.
La medida ideada lleva por nombre, Despliegue del Plan 700, en el que luego de varias inspecciones se detectó que hay un déficit en el suministro de harina de maíz en alrededor de 114 panaderías, por lo que distribuirán la materia prima a aquellos que la necesiten mediante los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP).
El representante de la Superintendencia responsabilizó a terceros por organizar un supuesto bloqueo con el pago de materias primas importadas, lo que ocasionó que no hubiese producción en el país y mucho menos distribución de insumos.
Mientras era entrevistado en un programa de la emisora Unión Radio, el funcionario desmintió los rumores que apuntaban a la institución como un sancionador arbitrario y expresó que la venta de pan no debe ser condicionada y que se debe garantizar la venta y el consumo del producto.
Fuente: El Carabobeño / AD