Están preparadas. Tienen las maquinarias listas, el conocimiento y la experticia necesaria para autogenerar divisas con la política exportadora impulsada por el Ejecutivo. Pero no lo han logrado. El 56% de las pequeñas y medianas industrias de Carabobo solo espera por el Gobierno para disponer de las divisas que requieren para la compra de insumos o el suministro de materias primas provenientes de las Empresas Básicas del Estado para reanudar sus operaciones e incorporarse al mercado internacional. Pero no cuentan con nada de eso, las líneas siguen paralizadas.
Por ahora ese grupo de más de 350 empresas no tiene productos para ofrecer en el exterior. Se trata de compañías que se encargan de la manufactura en el sector plástico, químico y metalmecánico, y cuyos materiales a transformar dependen en su mayoría de los despachos de la petroquímica nacional y de Sidor.
Jonathan Aldana, presidente de la Cámara de Pequeños y Medianos Industriales y Artesanos de Carabobo (Capemiac), explicó que sin capacidad para satisfacer el mercado interno, es imposible emprender proyectos factibles de exportación. “El problema del Gobierno es que sus fallas las quiere corregir por intermedio de terceros, en este caso somos nosotros los industriales que, aunque tenemos la disposición, no se nos resuelve el déficit de insumos para reencontrarnos con la productividad”.
En términos generales el sector trabaja en la región a menos de 30% de su capacidad y cuenta con inventario de 25% de materia prima.
Las pequeñas y medianas industrias instaladas en Carabobo forman parte vital de la economía del país. Capemiac agrupa a 643 empresas de diferentes sectores como plástico que se dedican a la elaboración de material de empaque para alimentos y otros productos; metalmecánico donde hacen láminas y perfiles para la construcción de equipos; químico que es elemental para diversas compañías; además de algunas firmas de alimentos y de manufactura de piezas para el sector automotriz. Todo con garantía plena de ser altamente competitivos en el mercado internacional.
Entre tres y cinco compañías pequeñas están logrando hacer exportaciones en renglones que no son de primera necesidad y que no tienen impacto para el consumo venezolano, al no generar una mayor productividad de las líneas que permitan un abastecimiento de los anaqueles.
Fuente: El Carabobeño / DB